miércoles, 2 de septiembre de 2020

Hay algo fabuloso del cerebro: todo.


 

Los que me conocen saben que soy un apasionado estudioso del cerebro. Me encantaría saber mucho más de lo que se, pero lo que hasta ahora he aprendido me ha mostrado que es una de las tareas más complejas que pueda existir: Entender su funcionamiento.

 

Entre todas las cosas que hace el cerebro, la que más me fascina es su ahorro de consumo.

El cerebro es un ahorrador de energía a todo dar. Debido a que consume más del treinta por ciento de la energía que producimos en el día, el cerebro siempre anda en búsqueda de cómo optimizar su funcionamiento y gastar menos energía, sobre todo en cosas triviales.

 

Esta estrategia, aunque parezca y sea fabulosa, trae consigo varias consecuencias negativas para el diario vivir. Por ejemplo, cuando aprende algo nuevo, tiende a repetirlo lo más parecido posible, para que en sus próximas ejecuciones se haga de manera fácil e inconsciente, gastando menos energía. Esto en un principio puede sonar positivo, y lo es, pero en su otra cara hace que el cerebro no busque otras maneras diferentes de hacer la misma función, solo solidificando y fortaleciendo los canales ya creados – sinapsis – y no se le hace necesario activar nuevas áreas o entretejer nuevas interconexiones.

 

Pongo un ejemplo: si aprendimos un camino de cómo llegar al trabajo manejando nuestro automóvil, y repetimos esa función unas cuantas veces, de seguro que vamos a poder llegar al trabajo sin pensar, en lo que conocemos como el piloto automático del cerebro o hacerlo inconscientemente. Eso está bien. Ahora, el cerebro también necesita ser retado para agilizar y mantener joven su funcionamiento, y esto se hace a través de ejercicios diarios, obligándolo a tomar rutas alternas, resolver acertijos y conseguir posibles soluciones.

 

No podemos dejar que el cerebro se conforme con buscar y ejercitar las formas más eficientes de funcionamiento. Lo tenemos que empujar a querer aprender todos los días cosas nuevas y diferentes. Como dicen acá en los Estados Unidos: “Use it or lose it” (Úsalo o piérdelo).

 

Por eso te invito a que todos los días busques y consigas diferentes formas de hacer lo que ya haces y despierte tu curiosidad a aprender cosas nuevas y distintas a las que ya haces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario