Mejorando en los estudios

Dice el dicho: "El tiempo pasa volando". Esto aplica ahora ya pasó el verano y nos adentramos al horario de clases nuevamente. Tanto si eres estudiante o padre de estudiantes, cada vez que se acerca el comienzo de otro año escolar muchas veces puede ser un dolor de cabeza.

En muchas ocasiones nos la pasamos peleando con nosotros mismos o con nuestros hijos por el bajo rendimiento escolar. Sin importar que tanto esfuerzo hagamos nosotros o ellos, los resultados parecen ser siempre los mismos.

Es por esta razón que deseamos compartir contigo información relacionada a este tema para ayudarte a deducir que es lo que puede estar pasando y recomendarte posibles soluciones.

En primer lugar hay que observar la historia. Esto quiere decir, como se ha manifestado esta situación a lo largo del tiempo. Debido a que hay situaciones que son temporales y específicas. Por ejemplo, cuando una persona baja los grados (notas) por un período de tiempo específico, pero venía bien, y luego las vuelve a aumentar. Para este tipo de situación puede ser entendido como un problema pasajero, algo que estaba sucediendo en la dinámica del hogar, el colegio o el trabajo. También quizás con ciertas relaciones como novios o amistades.

Hay otro escenario a considerar, en donde la persona venía bien hasta cierto punto y luego cae y no logra retomar vuelo. Esto también puede estar relacionado con un evento fortuito, quizás de origen emocional, o bien la persona se está enfrentando a retos mayores con los cuales no sabe o no puede lidiar.

Y está también el escenario en donde la persona ya viene sufriendo desde el principio de la etapa escolar con notas grados bajos, en donde la constante es promedio de "C" o "D" en prácticamente todas las asignaturas. Descartando primero cualquier condición psico-emocional que pueda estar presente, se pudiese sospechar de la presencia de algún tipo de problema de aprendizaje. Existen muchos tipos de problemas de aprendizajes, desde el típico caso de Déficit de la Atención, con o sin hiperactividad, hasta dislexia, problemas auditivos y/o oculares. Con tristeza le compartimos que hay familiares que han dejado pasar todas estas señales por años, sufriendo las consecuencias del deterioro de la autoestima de la persona con el problema de aprendizaje, muchas veces achacándolo a una supuesta "flojera".

Hay que tomar en consideración que si una persona sabe o intuye que no es buena para algo, o que algo se le dificulta, va a tratar en la medida de sus posibilidades, evitar entrar en contacto con eso. Si la persona no es buena para los estudios, y no tiene por qué serlo, los va a evitar a toda costa. Esto responde a muchas de la inquietudes de muchos padres que nos han preguntado: "Qué le pasa a mi hijo(a) que no quiere nada con los estudios o que hace lo imposible para no hacer nada de eso?"

Para esto recomendamos el uso de las inteligencias múltiples del Dr. Howard Gardner, bajando un test por Internet y aplicando para saber cuál de las inteligencias existentes posee la persona. El principio básico de esta teoría psicológica es que todos poseemos por lo menos siete tipos de inteligencia, mas allá de la tradicional inteligencia intelectual. Si logramos descubrir cuáles son las inteligencias primarias y las apoyamos a través de su estimulación disciplinada, las otras inteligencias van a tender a aumentar y la autoestima de la persona también aumenta.

Lo importante de todos estos escenarios es que nos conviene comprender que hay que permanecer alertas, monitoreando el desempeño, bien sea nuestro o de nuestros hijos, para poderles brindar el apoyo oportuno apenas lo necesite, y evitarles pasar por momentos que no sean necesarios experimentar, ya que con ayuda se pueden mejorar rápidamente.

En todos los casos antes expuesto es siempre recomendable buscar ayuda profesional. Se puede hacer pruebas y/o test psicológicos, pruebas de oído (audiometrías), de la vista, etc. La idea es ir descartando posibles orígenes del bajo rendimiento.

Se puede hacer entrenamiento cerebral con el uso del Neurofeedback para mejorar las habilidades mentales. Se puede ayudar a la persona con ejercicios físicos diarios, mejorando la alimentación, tomando suplementos naturales como las omegas 3, 6 y 9 y coenzima Q10. Existen ayudas de tutorías como el sistema Kumon, Sylvian, Tutoring club, y tutorías privadas individuales.

Es mucho lo que se puede hacer para ayudar a las personas que estén pasando por situaciones difíciles en el ámbito de los estudios, es por esta razón que te invitamos a que actúes hoy mismo a buscar esa ayuda, y comenzar a solucionar de una vez por todas este tipo de situaciones.

Juan Ricardo Díaz